¡Hola! Aquí ando de nuevo para presentaros un ingrediente básico
en nuestros cuidados veraniegos. La verdad es que ya os he propuesto algún cosmético
casero realizado con este producto pero aún no os había contado con algo más de
detalle sus propiedades. A petición de una lectora (a la que agradezco su interés)
os hago llegar información al respecto…
El polvo de Urucum lo clasificaríamos como el extracto seco
de una planta, en este caso de sus granos. El urucum es una planta utilizada originariamente por los indios
del Amazonas para la protección de la piel en caso de exposición solar. Actualmente
es utilizado en países sudamericanos como condimento y colorante alimenticio.
El polvo de Urucum es muy rico en betacaroteno y contiene
oligoelementos como el zinc, el magnesio, el selenio y el cobre. Gracias a sus
componentes se hace muy interesante en cuidados veraniegos ya que facilita el
bronceado (favorece la fabricación de melanina) a la vez que protege la piel
por su gran cantidad de antioxidantes naturales (previene el envejecimiento). Lo
encontraremos como ingrediente en cremas nutritivas, en cuidados cosméticos
para prolongar o potenciar el bronceado, en cuidados aftersun, en productos
para prevenir las estrías o el envejecimiento prematuro de la piel…
Cabe comentar que es un potente colorante y se utiliza en
productos cosméticos, a veces tan solo para dar color. Por último decir que
también tiene cierto poder repulsivo de insectos.
El polvo (después siempre de hacer un test por posibles
reacciones alérgicas) se puede incorporar a hidrolatos y arcillas para realizar
mascarillas, o a aceites para cuidados corporales. Lo más interesante es
realizar una maceración en aceite puesto que el betacaroteno es soluble en
aceite y así se aprovechan mejor las propiedades de este regalo de la
naturaleza.
Podréis encontrarlo en herboristerías, parafarmacias o tiendas específicas de creación de cosméticos caseros.
Macerado oleoso de Urucum
-100 ml de aceite vegetal (sésamo, avellana…)
- 10
gramos de polvo de urucum (Bixa orellana)
Se mezclan bien los
ingredientes en un frasco opaco y se deja en un lugar fresco y seco durante
varios días, agitando el frasco de tanto en tanto. Posteriormente, se filtra y
se guarda en un recipiente adecuado, hermético y limpio. Si se cuida, puede
mantenerse varias semanas. Se puede utilizar tal cuál mezclado con otros
aceites o macerados, incorporarlo a mantecas para hacer barritas de masaje o
incluirlo como fase oleosa en la creación de productos cosméticos caseros.
Cuando manipuléis el
polvo, no lo hagáis cerca de corrientes de aire o ventanas abiertas, recordad
realizar un test de sensibilidad.
(Más información sobre macerados oleosos,
aquí)
Recuerda que puedes visitar la siguiente receta:
Disfrutad del Sol con cuidado…